Por: Andrés Piña
Podemos cambiar el mundo, Camila Vallejo, Ocean Sur, 2012.
En “Podemos cambiar al mundo” aparecen un serie de artículos y textos escritos por la líder estudiantil, que como presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile llegó a estremecer al mismísimo gobierno y al neoliberalismo, con propuestas políticas en materia de educación, que no sólo proponían transformar esa concepción errónea que se tenía desde tiempos de la dictadura, sino que además dio esperanza a toda una generación de jóvenes que ya no creía en los mismos discursos de siempre. Un lindo libro revolucionario, para estos tiempos difíciles. Las universidades no deben ser criaderos de zombis para la máquina, deben ser centros donde el conocimiento se difunda y se genere.
El aparato imperialista en Centroamérica: Imprerialismo y revolución en Centroamérica, Roque Dalton, Ocean Sur, 2012.
En este primer tomo de la obra de Dalton, podemos tener un acercamiento de primera mano al pensamiento político de un poeta, que durante toda su vida tuvo la capacidad de ser un hombre de su tiempo. Un libro para fans daltónicos. El pirata Dalton, como lo llamaba Julio Cortázar, sigue dando patadas y sigue luchando, desde la otra vida.
La maleta de mi padre, Orhan Pamuk, Random House Mondadori, 2007.
Orhan Pamuk (1952), Premio Nobel de Literatura 2006, nos habla desde lo más profundo e íntimo de su ser en esta obra. En este discurso podemos apreciar la belleza con que Pamuk retrata la relación entre su padre y él. El amor a las cosas simples, la nostalgia que se crea en un momento y periodo determinados, en dónde el triunfo y el aprecio son solo el viento que sopla en las calles. Aquí sabemos de la necesidad de la literatura y de los caminos que esta toma. No hay más belleza que sentarse y oír hablar a un hombre acerca de algo que ama profundamente. También encontramos el discurso ¨El autor implícito¨ y ¨En Kars y en Frankfurt¨. Porque este libro no es sólo el compendio de los discursos más famosos de un autor exitoso, es también la oportunidad de oír hablar acerca de la importancia de ser escritor. ¨La maleta de mi padre¨ fue el discurso que Orhan Pamuk leyó en la recepción del Nobel. A veces las palabras más desinteresadas son las más influyentes, siempre y cuando se encuentren fuera de cualquier pretensión. Son a secas, la manera en que un hombre de la talla de Orhan Pamuk comprende al mundo, son una percepción acerca de las cosas llena de comprensión, sus discursos no son simples. Su visión es aguda y llena los huecos de la literatura. En palabras de Miguel Hernández, con piedras de futura mirada.