Por Kevin Frippson

Viernes casual, viernes social. El día predilecto para salir y echar la chela con los amigos y destrampar un rato el cuerpo. Fue con esa misma premisa que llegamos al Indie Rocks!, que se ha ganado un buen nombre por albergar excelentes shows (a excepción de su regla de oro: “si sales, ya no regresas”). La fiesta organizada por Summertime y Juliette prometía desde el momento en que nos dijeron: los vamos a poner a bailar y les vamos a dar mucho alcohol. Llegamos, nos quedamos y no paramos.

Por alguna extraña razón uno de nosotros no tenía idea que había barra libre; vaya sorpresa. Nos encontrábamos en una fiesta en la que más que ir a ver a los actos “en vivo”, los asistentes van a aparentar, o pretender, ser de una clase más “cool” que los demás. Que te cuentan que están ahí porque los invitó uno de los deejays o porque son amigos del organizador, mientras se avientan un pericazo (pura pose).

Pero al final de cuentas nosotros sí fuimos a ver a los actos, aún cuando el alcohol gratis comenzó a surtir efecto en nuestras neuronas. Primero nos encontramos con que los iztapalapeños Sonido Sabrosong no pudieron tocar porque llegaron sumamente tarde a su presentación, sin embargo llegaron muy temprano para saborear unas buenas cervezas. Nos echamos con ellos unas cuantas frías y ya entrados en materia nos contaron sobre su amistad con Bufi, sus problemas con algunas personas que no le dieron el valor que merece su proyecto y algunas situaciones más personales, de casi todo menos de su proyecto.

Blue Host abrió una pista con las aguas muy calmadas, el público estaba reacio a echar unos pasos con sus mixes que, la verdad, no estaban mal. Suponemos que les hacía falta un poco más de alcohol en las venas, porque para Tyrell (este proyecto que está dando bastante de qué hablar en el circuito del D.F.) ya muchos comenzaban a mover pies y caderas al ritmo de sus beats cadenciosos.

Las rondas de chelas no cesaban y la pista cada vez se ponía más candente. Era turno de Swing Atoms, quienes atrajeron a todos los que platicaban y fumaban en el patio del recinto para entrarle de lleno al baile y la pasión. Y todo esto para dar entrada a uno de los buenazos, o al menos más esperados y nombrados de la noche (recuerdo haber escuchado el nombre de su proyecto, sin exagerar, unas 30 veces antes de que se subiera a tocar), así es, nos referimos a Bufi. A nuestro parecer sí la rompió, pero creemos que su música está muy sobrevalorada, al menos en su círculo, pues todos hablan maravillas de él porque es ¿su amigo?.

Y bien, ya sabíamos que el mero bueno de la noche -ya casi madrugada- era Cherokee. Rich de Sonido Sabrosong nos contó, en su peda, que debieron cambiar el orden de Bufi con Cherokee, ya que la música o las mezclas de este último son más introspectivas y quizá romperían con el mood fiestero al final de la jornada. Afortunadamente, aunque sus beats si eran más down tempo, logró hacer vibrar al Indie Rocks!. Quizá fueron los buenos mixes, o que ya todos estábamos bien entrados en alcoholes, o una buena mezcla de ambos. Al final fue un show bastante disfrutable, tanto por la barra libre como por la buena música y los amigos que hicimos.